Montaron un show, allá por el 2023. Y muchos argentinos/as lo creyeron. Se tiraban con munición pesada con frases durísimas, pero era socios para llegar al poder. Hoy con la ambición de tener más y más.
En la Argentina libertaria, todo se puede dar, incluso el crecimiento tremendo de una de las presidenciables que denostaba, castigaba y descalificaba a quién hoy abrazo con profundo amor y respeto.
Somos así, claramente no se aprende más y está bien que suceda todo lo que está pasando. Para que de una vez y para siempre, los imbéciles que empoderan a su propio verdugo, queden en el camino y no estorben más.
De Peronista militante en los años 70, a la más determinante expresión de represión, hoy la Super Ministra sigue creciendo y con ella los que la rodean.
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