viernes, 27 septiembre, 2024
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La producción de litio en Argentina crece, pese a la caída de precios

A pesar de la caída en picada del valor del litio y aun sin la vigencia del Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), Argentina va a aumetar en un 50 por ciento su capacidad instalada de producción de carbonato e hidróxido de litio este año. El gobierno tiene previstas cuatro nuevas inauguraciones de plantas, además de la china-francesa Eramine Sudamérica, que ya comenzó a operar en julio en el proyecto Centenario Ratones en Salta. Arcadium Lithium, la mayor productora del país, aplicará al RIGI para financiar la expansión de su proyecto Fénix y la construcción de Sal de Vida. Mientras tanto, los funcionarios también mantienen su atención en el cobre, un mineral clave para la transición energética.

Con la planta de licuefacción de Gas Natural Licuado que YPF quiere instalar en Río Negro en el centro de la agenda, la minería tuvo poco espacio en el escenario de Amcham Energy Forum, el encuentro que organiza anualmente la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina. Sin embargo en el último bloque, compartieron escenario el secretario de Minería Luis Lucero con Marcelo Murúa, ministro de minería de Catamarca e Ignacio Costa, el gerente general de Arcadium Lithium, la principal empresa operadora de litio en el país.

En cartera

Arcadium Lithium, la compañía que surgió de la fusión entre Livent y Allkem, confirmó que aplicará al RIGI para la expansión de su planta en el proyecto Fénix y la construcción de Sal de Vida, ambas en Catamarca. De esta manera, intenta mitigar la ralentización que generó en el plan de inversión de la empresa la caída del precio del litio – que se ubicó por debajo de los 10.000 dólares la tonelada en julio significando una merma del 64,5 por ciento interanual: «Es un desafío seguir con estos proyectos con los precios actuales», aseguró Costa.

La expansión del proyecto Fénix implica una inversión de 1500 millones de dólares para pasar de las 30 mil toneladas actuales a 72 mil toneladas de producción. En tanto,  la construcción de Sal de Vida contempla una inversión de 900 millones de dólares. Con la merma de los precios, ralentizaron el avance de los proyectos: en vez de hacer ambos en paralelo, priorizarán la construcción de Sal de Vida y, una vez que termine, comenzarán con la expansión de Fénix.

Es que, más allá del RIGI o cualquier incentivo que pueda dar el gobierno, en el mundo pesa mas la caída del precio del litio que el contexto del país: “Tuvimos una reunión en Nueva York con inversores que les preocupan mucho más el precio del mineral», explicó Costa y agregó que «Arcadium Lithium es una empresa muy flexible, con una estrategia comercial capaz de adaptarse al contexto internacional, pero no todas las empresas de litio lo pueden hacer». 

Según la información a la que pudo acceder PáginaI12, la Secretaría de Minería espera aún cuatro inauguraciones más para este año: Mariana, Salar de rincón, Sal de Oro y Tres Quebradas. La más próxima será a fines de octubre, cuando se inaugure el quinto proyecto de litio en Argentina. Sal de Oro es el proyecto de la coreana Posco ubicado en la parte norte del Salar del Hombre Muerto, en la zona fronteriza de las provincias de Catamarca y Salta y estiman producir 25.000 toneladas de carbonato de litio, para luego agregar otras 25.000 en su primera etapa de expansión hacia 2025.

Cuando las cinco plantas inauguradas en 2024 estén en plena actividad productiva (probablemente a partir de 2025), sumarán 114.000 toneladas de carbonato de litio a la producción del país, que en 2023 fue de 39.525 toneladas.

Un pleno al cobre

«El litio es una realidad, el cobre es una oportunidad, que es enorme, es como cuando mirábamos Vaca Muerta hace diez años», fue contundente desde una pantalla en otro huso horario Daniel González, secretario coordinador de Energía y Minería del Ministerio de Economía de la Nación. 

Desde que La Alumbrera, la mina de cobre y oro a cielo abierto más grande de Argentina, dejó de operar a fines de 2018, no se puso en marcha ningún otro proyecto de cobre en el país. A pesar de compartir cordillera (y minerales) con Chile y Perú, que abastecen casi el 30 por ciento de mineral al mundo, Argentina cumple seis años sin producir ni exportar el mineral. Al igual que el litio, el cobre es considerado como un mineral estratégico para la transición energética, y es un recurso esencial para la industria electrónica, de energías renovables y electromovilidad. Se espera que su demanda se duplique hacia 2035. 

Argentina cuenta con seis de 23 proyectos que existen en el país en condiciones de comenzar su construcción en el corto y mediano plazo. De acuerdo a la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), puestos en marcha alcanzarían un nivel promedio de 1066 miles de toneladas por año (equivalente a 10 por ciento del déficit global de cobre en 2035). 

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