El economista Roberto Cachanosky en diálogo con Canal E, cuestionó duramente las estrategias del Gobierno en materia de inflación, deuda y consumo interno. “El 1,5% es una buena noticia para el Gobierno”, admitió el entrevistado al referirse al último dato de inflación. Sin embargo, fue tajante al señalar que “la inflación núcleo fue del 2,2%”, un indicador que considera más representativo por excluir precios regulados y estacionales.
El economista advirtió que “el Gobierno viene pisando las tarifas de los servicios públicos y el tipo de cambio”, lo cual contribuye artificialmente a contener los precios.
Respecto a los aumentos previstos para junio en transporte, electricidad, gas y otros rubros, Cachanosky afirmó: “En mayo los regulados aumentaron muy poco, 1,3%, porque los postergaron para junio”. Según explicó, esto forma parte de una estrategia oficial que combina control de precios con intervención en el mercado cambiario.
FMI: respaldo político y estrategia de endeudamiento
“No creo que haya ningún problema con la revisión del Fondo Monetario”, aseguró Cachanosky, aunque se mostró crítico con la forma en que el Gobierno busca reforzar reservas: “Están colocando deuda en vez de comprar dólares con superávit”.
También apuntó que “el apoyo de Trump a Milei influye en el FMI”, y destacó que el organismo “mira más el resultado fiscal primario que los intereses de la deuda”.
Apertura económica y pymes en desventaja
Sobre la apertura de importaciones y las compras online con exenciones, Cachanosky expresó su respaldo a una economía más abierta, pero con condiciones claras: “Lo primero que tenés que hacer es bajarle impuestos a las empresas locales, no atrasar el tipo de cambio”.
Criticó la secuencia del gobierno: “Están abriendo la economía sin antes mejorar las condiciones macro para que se pueda competir”.
Consumo frenado y salarios como ancla
Consultado por el consumo de los hogares, fue contundente: “Está estancado en el mejor de los casos. Restaurantes, hotelería y comercio están muy mal”.
También denunció que el gobierno limita los aumentos salariales para frenar la inflación: “Están usando los salarios como ancla. No quieren homologar aumentos por encima del 1% mensual”, lo que genera una contradicción interna en el modelo económico.
Los dólares del colchón y la falta de confianza
Frente a la intención del Gobierno de movilizar los dólares del ahorro informal, fue escéptico: “Difícilmente la gente vaya a sacar demasiados dólares del colchón”, argumentando que ya en experiencias anteriores, “ni los que los tenían en blanco los movieron”.
Según el economista, “la gente hoy está vendiendo dólares para pagar la tarjeta. No va a aumentar su gasto si ya está en déficit”.
Endeudamiento creciente y maquillaje fiscal
Cachanosky criticó con dureza la estrategia de financiamiento estatal: “Es lo que saben hacer: colocar deuda todo el tiempo”, y alertó que el supuesto superávit es solo primario: “No hay tal cosa como superávit financiero. Hay un déficit importante”.
Según estimaciones que citó, el déficit financiero podría haber llegado al 4,8% del PBI en los primeros cuatro meses del año. Denunció que el Banco Central “emitió 11 billones de pesos en abril para financiar al Tesoro”.
Ajuste fiscal: los verdaderos afectados
Finalmente, el economista fue lapidario al referirse a los recortes del gasto público: “El superávit fiscal que tienen es consecuencia no de que la casta pagó el ajuste. Lo pagó el jubilado”.
Recordó el veto presidencial al aumento de jubilaciones como símbolo de esa política: “Milei salió a decir: el superávit fiscal no se negocia. ¿Qué está diciendo con eso? Que los jubilados pagan el ajuste”.