La Iglesia santafesina se expidió frente al proyecto de reforma de la Constitución provincial y admitió la diversidad de credos entre los habitantes del territorio, admitiendo “ser reconocida dentro de la pluralidad, sin privilegios”
La Iglesia Católica de Santa Fe expresó su posición respecto a la reforma constitucional de la provincia y manifestó su disposición a “ser reconocida dentro de la pluralidad, sin privilegios”. A través de un comunicado firmado por los obispos Sergio Fenoy y Matías Vecino, el Equipo Arquidiocesano de Pastoral Social y la Junta Arquidiocesana de Educación se oficializó la posición, que tiene características históricas.
“Como obispos, quisiéramos reflexionar con mayor detenimiento, tras consultar a otros obispos de la provincia y a un grupo amplio de fieles comprometidos en diversos ámbitos sociales”, señala el documento. El texto recuerda que la actual Constitución provincial, vigente desde 1962, declara que “la religión de la provincia es la Católica, Apostólica y Romana, a la que le prestará su protección más decidida, sin perjuicio de la libertad religiosa que gozan sus habitantes”.
Sin embargo, los referentes de la Iglesia consideraron que este párrafo resulta ahora “inadmisible desde todo punto de vista”.
“Desde mediados del siglo pasado, la Iglesia ha afirmado la justa autonomía y cooperación entre el orden temporal y el religioso”, marcaron los obispos.
Y reconocieron que “la provincia no es, ni puede ser, de ninguna manera católica”, observando como “anacrónica y errónea” la superposición entre el sistema social y la fe religiosa.
Por ello, sugirieron que la redacción del artículo 3 de la futura Constitución, o su reemplazo, debería “reflejar el respeto a la diversidad de una sociedad plural en sus expresiones religiosas”.
El comunicado también aclara la diferencia entre el sostenimiento del culto y la colaboración mutua en actividades orientadas al bien común. “El Estado no paga el sueldo de los sacerdotes. Salvo unas pocas capellanías y el mantenimiento de templos considerados patrimonio histórico, no existen aportes del Estado provincial a la Iglesia Católica”, puntualizaron.