El paro de 24 horas dispuesto por la Mesa Nacional del Transporte para este miércoles viene con la previa de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), que realizará este martes un cese de actividades a partir de las 12 y por 36 horas, con una movilización al ministerio de Desregulación y Transformación del Estado que conduce Federico Sturzenegger. La medida de fuerza afectará a toda la administración pública y es en rechazo al plan de ajuste que el gobierno viene implementando en su modelo de «motosierra».
El secretario General de ATE, Rodolfo Aguiar, afirmó que «en el Estado hay sindicalistas que militan la resignación y el miedo en los sectores de trabajo. Destruyen nuestros salarios, nos echan como perros, quieren vender todos los inmuebles del Estado» y se preguntó: «¿Cuándo van a parar si no paran ahora? ¿Cuándo van a marchar si no marchan ahora?».
Las críticas parecen apuntar contra el titular del otro gremio estatal, la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), Andrés Rodríguez, a su vez secretario Adjunto de la Confederación General del Trabajo (CGT), a quien califican como «dialoguista», pero a su vez activó el Frente de Gremios Estatales que dispusieron el estado de alerta y movilización.
A qué hora comienza la marcha al ministerio de Desregulación
Desde ATE informaron que la concentración será a las 12 en el Obelisco y desde allí se movilizarán hacia la sede de la mencionada cartera ubicada en Av. Roque Sáenz Peña 788, Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Se descuenta que la ministra de Seguridad Patricia Bullrich desplegará el protocolo antipiquete por lo que habrá que estar alerta ante posibles incidentes.
La huelga se extenderá durante todo el miércoles, coincidiendo con el cese de actividades que impulsaron los transportistas, a los que se sumaron gremios como docentes, universitarios, Viales, Centro de Patrones, y organizaciones sociales, entre otros.
Aguiar planteó que «la única manera de evitar que el Estado termine de ser usurpado por los grandes grupos empresarios es estando en la calle», y sostuvo que «la gente empieza a tomar conciencia de la estafa. Le mintieron, no había ñoquis ni un Estado sobredimensionado. Este gobierno protege y se abraza a la casta».
Advierten que usan la paritaria para disciplinar a los estatales
En referencia al deterioro de los salarios en la administración pública, el dirigente explicó que «un empleado público con hijos y que tiene que alquilar, no llega a ni a mitad de mes. Exigimos la inmediata reapertura de las paritarias y reclamamos un aumento que permita recuperar todo el poder adquisitivo perdido durante los últimos meses» y añadió que «rechazamos que la paritaria en la Administración Pública Nacional sea utilizada para disciplinar el resto de las negociaciones públicas y privadas».
El líder de ATE advirtió que «si nuestros justos reclamos no encuentran respuestas, las medidas se van a profundizar, la conflictividad irá en ascenso y la afectación de la paz social no será nuestra responsabilidad. Será responsabilidad de quien tiene que garantizar con políticas, que es el gobierno».
Aguiar fue uno de los primeros dirigentes en enfrentar el modelo de Javier Milei, lo que le valió el reconocimiento de uno de los titulares de la CGT y secretario Adjunto de los Camioneros, Pablo Moyano, con quien formó una virtual alianza que hoy se ve reflejada en el paro que llevan adelante desde el mediodía de este martes y continuará durante todo el miércoles.
Rechazo a las privatizaciones y exigen que terminen con los despidos
A pesar de las coincidencias con los gremios transportistas, universitarios y demás, ATE indicó que la protesta se basa en «la abrupta pérdida del poder adquisitivo en el Estado Nacional que ya supera el 34 por ciento durante la gestión de Milei, sumado a la intención del gobierno de congelar los salarios para lo que resta del año. Ante esta situación, exigimos la inmediata reapertura de las paritarias y un aumento que permitan recomponer los salarios».
También reclama por el cese de los despidos en el sector público y la inmediata reincorporación de todos los «ilegítimamente cesanteados», al tiempo que cargó contra «la falsedad de las intimaciones a jubilarse a los trabajadores -cosa que ya existía-; la mentira de los cargos públicos hereditarios; y la amenaza de enajenar más de 300 inmuebles del Estado».
Asimismo, rechazó las privatizaciones de las empresas estatales y el vaciamiento de organismos como el recientemente anunciado en AFIP.