Red Bull le puso fecha a la audiencia por la investigación sobre un presunto «comportamiento inapropiado» del director ejecutivo del equipo de Fórmula 1, Christian Horner, con una mujer miembro del equipo. El viernes 9 de febrero los investigadores analizarán la evidencia y escucharán a las partes involucradas para determinar si la denuncia puede ser confirmada o, por el contrario, desestimada.
Si consideran que Horner actuó en concordancia con la denuncia, la marca de bebidas energéticas que auspicia a la escudería podría desafectarlo de su cargo al frente del equipo, justo el año en que comenzaría su vigésima temporada.
En su denuncia, una empleada aseguró que el expiloto le remitió fotos de sus genitales y otras en las que se lo vería desnudo. De momento, Red Bull le otorgó a Horner la presunción de inocencia y no lo removió del cargo, sin embargo la suerte podría cambiar el viernes cuando se realice el careo entre los involucrados en una audiencia que se desarrollará en el Reino Unido.
El británico negó las acusaciones pero se desconoce cuál será su estrategia de defensa cuando responda las preguntas de los investigadores. “Niego completamente estas afirmaciones”, declaró Horner al portal MailOnline, donde también calificó de “loca” su imputación.
Horner en su hora clave: podría dejar Red Bull. Foto: AFPEn caso de que Horner sea despedido -o invitado a dar un paso al costado-, el candidato a sucederlo, al menos de manera interina, es el mecánico Jonathan Wheatley quien además es el director deportivo de la escudería y fue una de las figuras clave en la conquista del Mundial 2021 en Abu Dabi.
Horner fue contratado para dirigir Red Bull en 2004 cuando la compañía de bebidas energéticas compró el equipo Jaguar. Desde entonces, se desempeñó como jefe del equipo y logró seis campeonatos de constructores: los de 2010, 2011, 2012, 2013, 2022 y 2023.
¿Culpable o víctima de una interna?
Tras el fallecimiento en octubre de 2022 de Dietrich Mateschitz, fundador de Red Bull y protector de Horner, algunas voces insinúan que las acusaciones no tienen base real y podrían ser parte de una estrategia para desplazarlo del mando y señalan como argumento un tenso enfrentamiento durante la temporada pasada que protagonizó con el asesor ejecutivo de la escuadra, Helmut Marko.
Enemigos íntimos: Horner, Verstappen y Marko en 2023. Foto EFEEn aquel conflicto, la estrella del equipo Max Verstappen expresó abiertamente su apoyo a Marko y dejó al desnudo una lucha interna por el poder en el equipo.
El futuro de Horner dentro de la estructura parece depender del principal accionista de Red Bull, Chalerm Yoovidhya, quien posee el 51 por ciento del paquete y mantuvo la confianza en su director ejecutivo, al menos hasta que las pruebas no sean confirmadas.
En los próximos días, su esposa Geri Halliwell -ex líder de las Spice Girl– brindará su apoyo incondicional pese a que, según el diario británico Daily Mail- “está devastada” por las acusaciones.
En ese contexto, Red Bull debe ser expeditivo: la nueva temporada comenzará el 2 de marzo en el Gran Premio de Baréin y en poco más de una semana, el 15 de febrero, la escudería presentará el el RB20, el nuevo monoplaza con el que intentará que se hable solo de lo que sucede en las pistas.