El martes pasado el ministro de Economía, Luis Caputo, realizó las primeras medidas económicas del gobierno de Javier Milei y tuvieron su impacto en los diferentes sectores.
Jorge Giraudo, director del Observatorio de la cadena Láctea Argentina, comentó por LT10 que estas cuestiones de devaluación y los aumentos de algunos precios que inciden en los costos afectaron al sector que ya venía arrastrando problemas por las sequias aunque a fin de año tuvieron una mejora en los niveles de exportación, pero que se nota un cambio en el consumo.
El referente del sector explicó: “En América Latina tanto Argentina como Uruguay, es de los principales consumidores de lácteos. Nosotros normalmente consumimos 200 litros equivalente por habitante y por año. Tenemos la particularidad de que somos grandes consumidores de quesos. El argentino promedio como entre 12 y 14 kilos de quesos al año. Este consumo se mantiene en el volumen vigente pero cambia en su composición”.
En este sentido, especificó que se mantiene el consumo de leches fluidas (especialmente las larga vida), queso cremoso o cuartirolo, queso en barra para el sándwich y algún duro fresco. Por otro lado cayó el consumo de productos de mayor valor agregado como los yogures, flanes, postres, quesos duros de alta maduración y leches saborizadas. Todo esto se remplaza por sustitutos como por ejemplo los rallados por pasta sabor queso.
En cuanto a los aumentos del sector en el año, Giraudo remarcó: “Hay dos precios. El precio minorista que publica INDEC, que subió prácticamente 150% interanual”, pero aclaró que en unos días va a salir el índice mayorista “es el índice al que vende la industria”, y subió más de un 120 %.
En este sentido, el referente del sector dijo que hay una diferencia de unos 20 puntos entre un precio y el otro porque los controles de los congelamientos se hacían en los precios de fabrica, por lo cual el vendedor cobraba un incremento que no llegaba ni a la fabrica, ni a los productores “y esto es algo que hay que corregir”.
En cuanto a que se podría esperar en los próximos días, Giraudo anticipó que cuando se reponga en las góndolas, el litro de leche podría llegar a rondar los 800 pesos pero que no saben que puede pasar con el consumo. En este sentido reflexiona que “en una economía normal el precio lo pone el consumidor, es decir, vos llegas a la góndola y se presenta un litro de leche 1200 pesos el consumidor no lo compra”.